El caso data de principios de julio, cuando se conoció que una oficial de la Policía de Santa Cruz que prestaba servicios en la comisaría 1ra de El Calafate denunció que estaba siendo objeto de acoso laboral y sexual por parte de uno de sus jefes.

Al formalizarse la denuncia de la mujer, el oficial fue separado preventivamente de sus funciones de acuerdo a lo que indica el reglamento policial, ordenándose que se realice el sumario administrativo interno.

Como había informado señalcalafate.com, la mujer denunció que sintió acoso y abuso sexual por parte de su jefe, en reiteradas oportunidades, llegando a tocamientos. 

La policía ordenó el sumario administrativo y la separación de las funciones del hombre denunciado.

El reglamento policial indica que la separación preventiva debe ser de hasta por 30 días.

Si bien hay antecedentes en los que se ordenó la ampliación de los plazos de suspención mientras se realiza la investigación interna, en este caso la Unidad Regional Suroeste resolvió que el jefe de comisaría vuelva a sus funciones, lo que ocurrió días atrás.

Ante la consulta de este medio, desde la Unidad Regional Suroeste se confirmó que el oficial volvió a sus funciones mientras sigue el trámite del sumario interno en que el denunciado debe presetar las pruebas a su favor.

Al mismo tiempo, la oficial que realizó la denuncia, que también llegó al juzgado de isntrucción de la ciudad, pidió el cambio de lugar de trabajo, siendo asignada a otra dependencia policial.